lunes, 30 de septiembre de 2013

¡Ay!, estamos despatarradas después de la manifestación de ayer pero ¡que bien lo pasamos! ¡Que bonito fue todo! ¡Una fiesta para los sentidos! Aún lo veo todo verde.

Llegamos a la Plaza de España y allí estaba el viejo rey Jaume con su camiseta de CRIDA. Tan pancho él que hasta se le veía rejuvenecido. En seguida nos metimos entre la gente, junto a una batucada y no paramos de bailar, de gritar, de meter ruido con pitos y sirenas, de leer los lemas de las pancartas y de los globos verdes que volaban sobre las cabezas. Uno llevaba pintada la cara de nuestro Pinocho y decía "una mambelleta, per favor" Y vaya si le dieron tortas mientras iba y venía, subiendo y bajando.

Cuando supimos que la cabeza de la manifestación ya había llegado al final, nosotros aún no nos habíamos movido y tardamos en hacerlo un buen rato más, sobre todo por culpa de la abuela... Tanto saltó y brincó que no se dio cuenta de que había perdido a Pascualita ¡No estaba en el bote donde la había metido! y entonces le surgió el espíritu de la Faraona - "¡No moverse! El pendiente... digo, lo que iba aquí dentro ¡tiene que aparecer!" -

Hizo que la gente reculara y nos metimos a gatas entre las piernas de la multitud. La Cotilla, a la que encargamos que no los dejara avanzar, estaba más enfadada que un mono porque ya había empezado a tantear bolsillos y carteras y la habíamos interrumpido, sin saber por qué.

Pascualita no aparecía y la gente empezaba a ponerse nerviosa - ¿Qué hacen esas ahí? - Boicotean la manifestación ¡son infiltradas del Gover! ¡Fuera, fuera, fueraaaaaaaaaa! - El griterío era ensordecedor pero por encima de él, reconocí el clásico grito de alguien que ha sido mordido por la sirena. Gateé todo lo deprisa que pude, dejándome las rodillas en el asfalto, hasta que vi unas piernas bailando una danza salvaje ¡Eran de la víctima! Me levanté y de un fuerte tirón, le arranque el bicho que se trajo medio lóbulo de la oreja izquierda entre las mandíbulas.

Los gritos del hombre fueron coreados a placer por la concurrencia que creía que era un nuevo entretenimiento. Escondí a Pascualita en mi escote y me uní a la abuela y la vecina hasta terminar el recorrido. Y no está de más que diga que hubo manifestantes que se quedaron maravillados viendo mi escote moverse como si tuviera vida propia. ¡Dichosa sirena!

Al llegar a casa corrió el chinchón. Celebramos que tanta gente saliera a la calle en apoyo de los Maestros, los personajes más importantes de nuestra sociedad, a pesar de lo que piensan los políticos.

domingo, 29 de septiembre de 2013

¡Hoy es el día de la que se espera, sea la gran Manifestación a favor de una Escuela Pública digna! La ciudad se ha vuelto verde, respira verde, luce verde. ¡Será una fiesta verde! O eso esperamos. La abuela ha dormido con un camisón verde, que compró en la tienda del señor Li, para ir ambientándose. Y esta mañana ha terminado la funda verde, con un embudo dibujado, para el termo de los chinos... que no creo que lo pueda usar Pascualita porque parece el muñeco de Michelín con cola de pez.

Para desayunar ha puesto té verde con la consabida ensaimada. - ¡Me niego a renunciar a mi cola cao! - "Lo siento, pero las cosas son así: o té verde o nada de nada" - ¡Abuelaaaaaaaa! - "Y da gracias que no te pongo un aguacate" - ¿Para mojar? - "¿Por qué no?"

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaa! ¿Me invitáis a un café con leche?... ¿esto qué es?... - "Té verde" - Huy... ya empiezas a desbarrar. Eso es cosa de la edad... Por cierto, al pasar por el Consulat he oído cantar. - ¿Allí? Pues no sé que tendrán que celebrar... ¿Qué cantaban? - ¡Que llueva, que llueva...! Bueno ¿y ese café con leche?

La abuela ha intentado meter a Pascualita en el termo y no ha habido manera. Los rollos de grasa de su cintura lo impedían. - "¡Pues tiene que entrar! Quiero que vea la manifestación a favor de la Educación... Si aprieto un poco más... assssssiiii... ¡No te salgas, boba! ... - La abuela, empeñada en meterla, apretaba y apretaba, hasta que la pobre sirena se ha puesto roja como la grana, a punto de estallar. Entonces ha sacado sus dientes de tiburón y la abuela se ha dado por vencida - "¿Y ahora qué hacemos?"

Se ha colgado del cuello una botella de coca cola, recortada en la parte superior, con un poco de agua y Pascualita dentro - ¡No puedes llevarla así! Se ve mucho. - "Nadie se dará cuenta. Mira. Lo tapo con un trapo verde y Pascualita solo tendrá que sacar la cabeza... Y cuando me canse, lo llevarás tú... Anda, cógelo que nos vamos" - ¡Tendrá cara!


sábado, 28 de septiembre de 2013

A la Cotilla le ha faltado tiempo para ir a contarle a Andresito los ataques que sufre su novia por parte de su primer marido. Y él a venido raudo a casa... pero no ha entrado. - "¿Por qué no pasas?" - Si ha sido capaz de hacerte esto a ti, que no me hará a mí.- La abuela puso cara de no saber de qué hablaba porque, realmente, no lo sabía. - Hablo de tu primer marido... ¡Madre mía, como te ha puesto! - "¡Cuando coja a la Cotilla le voy a poner las peras a cuarto!"

Por más que la abuela insistió, Andresito no entró. Quería que se fuera con él. A su casa. A salvo del mal genio del abuelito ¡Menuda fama se estaba ganando el pobre después de la tira de años que hace que se lo cargaron! Estas cosas me dan rabia y tengo que morderme la lengua para no contar lo que sé, sobre todo para no quedarnos sin la Torre del Paseo Marítimo. Total, el abuelito ya no está y la Torre tiene unas vistas a la bahía que bien valen que tenga la boca cerrada.

Está ocurriendo un extraño fenómeno. A pesar de que tenemos a Pascualita haciendo un estricto régimen de comidas... sigue engordando. ¿Qué le ocurrirá a su metabolismo? ¿Quizás no sea como el nuestro y cuanta menos comida coma, más engorda? Me gustaría hablar de esto con un veterinario de peces... Buscaré por internet a ver si encuentro una explicación.

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaa! - "¡A ti quería verte, lengua larga!" - ¿Me echabas de menos? - Mientras discutían, la abuela iba y venía de la cocina porque tenía la sartén al fuego. Una de las veces fui tras ella para beber un vaso de agua y ... ¡¡¡La pillé!!! Ya no necesitaba ni veterinario, ni internet, ni nada de nada. Pillé a la abuela con las manos en la masa ¡dándole trocitos de jamón serrano a la sirena! Con razón ya no nos atacaba y seguía engordando como un cerdo - ¡Ajá! ¡Te pillé! - "¡Que susto me has dado!... eh, eh... eh... le he dado un trocito muy pequeño... y no grites que no hay para tanto" - ¡Habíamos quedado ... - "¡Ya sé como habíamos quedado pero... me da penita la pobre"... ¿Penita? Pues se queda sin boda. - "Además estoy harta de sus mordiscos. Me duele todo" - Pascualita se asomó al oírnos discutir. ¿Supo que hablábamos de ella y de su régimen? 

Se sumergió y apareció de nuevo con los carrillos inflados, llenos de agua venenosa. En el momento que me escupió, me agaché y le dio de lleno en el ojo a la Cotilla que entraba a ver de qué hablábamos.  

Hemos comido solas mientras la vecina duerme la mona en el sofá. Da grima verle el ojo pero le ha pasado por meter las narices en conversaciones ajenas... La abuela ha hecho sopas mallorquinas...y cuando duerma la siesta le daré un poco a Pascualita, que se que le gustan. Estoy harta de sus delirios en los que nos confunde, a la abuela y a mí, con exquisitos manjares.

viernes, 27 de septiembre de 2013

La abuela y yo parece que venimos de la guerra. Vamos llenas de pequeñas heridas e hinchazones, por todos lados. La paciencia de Pascualita ha llegado al límite y ante nuestra negativa a darle otra comida que no sea la de peces, nos ataca y nos escupe en cuanto nos tiene a tiro.

Estoy a punto de tirar la toalla. Si quiere engordar como una ballena, que lo haga pero no quiero pasarme el día con las gafas de sol puestas dentro de casa. Porque los ataques vienen de cualquier lado. Repta por todas las habitaciones buscando migas o nuestros pies. Y nos muerde. Casi no puedo caminar. Tengo un ojo a la funerala porque me escupió estando yo desprevenida. Esto es un sinvivir. Por la noche nos encerramos bajo llave para que no nos ataque cuando dormimos.

Esta mañana, mientras desayunábamos en la cocina, la abuela ha puesto un hule sobre la pila bautismal para que no nos vea la fiera corrupia. - ¿No se ahogará? - "Bicho malo nunca muere" - Podríamos darle un trocito de pan con aceite y nos dejaría en paz. - "¡Ni se te ocurra! Quiero que venga a mi boda echa un figurín o no cabrá en el termo de los chinos" - La pobre está mal acostumbraaaaaaaayyyyyyyyyyyyy!!!

Pascualita quería comerse mi meñique - ¡Abuela, quítamela que me comerá enteraaaaaa! - Después del tirón de rigor, la abuela la lanzó con rabia sin mirar donde caía. - ¿Dónde está? No la veo ¡aaaayyyyyyyy que dolor tengooo! - "Ni lo sé, ni me importa. Es una malcriada... ¡¡¡La olla!!!"

Flotando sobre el potaje de garbanzos que se estaba cocinando, Pascualita estaba feliz comiendo garbanzos a dos carrillos - ¡Aún están duros.Y se va a quemar! - "¡Nos dejará sin comer!" - Gracias a la ayuda del guante de acero, la abuela pudo sacarla de aquella sauna. - "¡Estoy por echarla al wáter y tirar de la cadena!" - gritó, harta, la abuela. - ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaaaa! ¡Eso tendrías que haberlo echo hace mucho tiempo! - "¿El qué?" - Tirar a tu nieta al wáter. Te hubieses ahorrado muchos disgusto. Ahora no cabe. Hummm... ¿Huele a potaje de garbanzos? ¡Ya era hora que hicieras! ¡Me pido tres platos! - ¡Egoísta! - ¿Qué os ha pasado?... ¡Ay, Dios mío!... ¿Os ha atacado... el abuelito?... ¡Pon mis raciones en un taper que me las comeré en mi casa. Yo aquí no me quedo, ni loca!


jueves, 26 de septiembre de 2013

Tengo un dilema con el dichoso tiempo. Por un lado está el fraile Paco que, como es de casa, tengo que hacerle caso. Por eso, cuando salgo a la calle lo hago con el paraguas bajo el brazo aunque haga un sol como el de hoy, que tira de espaldas. Y por otro, está el clásico hombre o mujer del Tiempo de la tele. Esos que siempre, siempre, siempre, tienen que hablar poniéndose delante de las Baleares. La abuela y yo nos pasamos el tiempo estirando el cuello para ver las temperaturas a través de ellos, o si va a llover ¡lo que sea! Pero la tele aún no es tridimensional, por lo menos la nuestra y acabamos esperando, pacientemente, a que el locutor o locutora, tenga a bien apartarse.

Más de una vez, Pascualita se ha escapado de las manos de la abuela y se ha estrellado contra la pantalla del televisor con los dientes de tiburón dispuesto para morder, desgarrar y triturar al pasmao del Tiempo. Y todo porque a la abuela se la llevan los demonios - "¡Quítate de ahí! ¡¡¡Qué te quites, inútil!!! Ponte frente a Portugal que nos la trae al pairo... Serás... ¡¡¡Lo reventaría a éste tío!!!"

Los gritos de enfado exasperan a la sirena que no puede consentir que su amiga se sulfure, que para eso ella es como el Cid Campeador, solo que en vez de la espada Tizona, luce una hermosa, doble y puntiaguda dentadura.

Lo peligroso es que estas cosas ocurran cuando está la Cotilla en casa. Cuando la abuela se sulfura, se queda ciega y sorda a todo lo que no sea lo que le inteesa a ella, y temo que un día monte el espectáculo delante de la vecina y entonces se enterará todo el mundo de que tenemos una sirena... Ese día será el principio del fin de la estancia de Pascualita en casa. Y tal vez el último día de la Cotilla en la Tierra. ¡Menuda es la abuela!

Ahora estamos pendientes del tiempo que hará el domingo. ¿Tendremos que ir a la manifestación por la Educación, con paraguas o sin. Lo que es seguro es que caeran cuatro gotas (¿?) ¿Dónde? porque cada vez que sale el mapa cambian las gotas de sitio ¿en Menorca? ¿al norte de Mallorca? ¿hará sol? Es un lío que da dolor de cabeza - "Ay, no puedo más... Pónme un chinchón, a ver si se me pasa" - ¡Avemariapurísimaaaaaaa! Pónme a mi otro, ya que estás. A ver si también se me pasa. - ¿El qué? (pregunté, mosqueada) - Lo mismo que a tu abuela. - ¡No sabe lo que le pasa! - Bueno... supongo que tiene... ¡sed! Eso es. Tiene mucha sed, como yo. ¡Mira, tengo la lengua como el papel de lija. Rasposa! - Aquí tiene algo bueno para la sed ¡Un vaso de agua fresca! - ¿De dónde sacaste a esta nieta? ¡Que cruz tenemos con ella!

miércoles, 25 de septiembre de 2013

¡Tengo que ir al oculista! ¡¡¡Lo veo todo verdeeeeeeee!!! La casa está llena de plantas, verdes. Los trapos de cocina, las toallas,los manteles, ¡mis bragas y las de la abuela también son verdes! ¡Todo, todo, es verde! - ¿Abuela qué has echo? - "Lo que tendrías que hacer tú. Apoyar a la Educación contra el ordeno y mando" - ¿No te parece que te has pasado un poco? - "¿Yooooooooooooo? Ni una pizca. Si hasta García Lorca está con nosotros" - Ay, Dios mío. Ya desbarras. - "El dijo: verde que te quiero, verde. Verdes campos, verdes ramas... ¿o no?"

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaa! ¿Habéis visto que bien me sienta el verde? - La Cotilla dio unos pases "de modelo renqueante" para que la viésemos con un vestido verde que a saber de dónde lo ha sacado. Y entonces se fijó en la pila bautismal, mejor dicho, en lo que había en la dichosa pila - ¿Qué clase de pez es ese? - "Es un modelo exclusivo" - Pero si es un pez. - "Pero raro" - Y tanto, como que es verde... pero verde, verde... ¿es comestible? - "No tengo ni idea pero como intentes tocarlo te quedas sin manos" - ¡Vale!... parece que lleva una camiseta. - "Tu lo has dicho ¡parece!"

A la hora de comer no nos hemos librado del verde: espinacas, guisantes, acelgas, todo revuelto con huevos. Como dice la abuela cuando se le mienta a nuestro Pinocho particular - "Para huevos... ¡los de las gallinas!"

martes, 24 de septiembre de 2013

La mañana ha sido tranquila... menos para Pascualita. Se ha enfadado mucho con nosotras porque su desayuno se ha limitado a una ración, escueta, de comida para peces. Y por mucho que ha saltado a la mesa de la cocina, ha reptado hasta la abuela o hasta a mi, mendigando un poco de ensaimada o pan tostado, no ha recibido nada. Naturalmente, toda acción trae consecuencias y eso es lo que ha pasado.

Harta de que no le hiciéremos caso, ha tomado impulso y se ha dejado caer en el café con leche de la abuela. que, inmediatamente, la ha sacado fuera. No le ha dado tiempo a relamerse. Luego ha echo lo mismo en mi taza de cola cao y la metido en la pila bautismal. Nos hemos puesto las gafas de sol y hemos seguido desayunando aunque sin perderla de vista.

Nos han llovido chorritos de agua envenenada. A coletazos ha dejado el suelo perdido. Hemos visto sus dientes amenazadores, una y otra vez. Pero no hemos dado nuestro brazo a torcer. Tiene que adelgazar para poder meterse en el termo de los chinos el día de la boda.

Antes del mediodía, ha venido la Cotilla: - ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaaa! ¡Esto es un sinvivir! Ya no puedo salir a la calle sin que me rodee la marea verde. Miles de personas con la camiseta verde de Crida, me salen al paso desde que se han enterado de que le di 10 euros a una maestra. ¡Juro que nunca más volveré a caer en la tentación de hacer una buena obra! - "¡Ay, Cotilla, no te des tanto pisto. La gente iba hacia el Parlament" - Por allí estaba yo "trabajando" aprovechando que las claveleras están muy vigiladas pero yo no, porque soy una dulce viejecita de la que nadie sospecha jejejejeje  - ¡Menudo callo está hecha! - Que triste es oír a una trabajadora denigrando el trabajo de otra... ¡te denunciaré al Sindicato! - ¿A cual? ¿al del crimen? - ¡No sé como la aguantas! (le dijo a la abuela) ¡Que cruz tienes con ella! - "¿Y al final qué ha pasado?" - ¿Qué ha pasado de qué? - "Con el TIL" - No lo conozco ¿quién es? ¿tiene una buena cartera?

Después de comer hemos acordado que el domingo vamos a ir todas a la manifestación - ¡Pero no pienso dar un euro! - Vale, pero tampoco "trabaje" - ¿Habrá aglomeraciones? - "¡Claro! Un gentío, ya lo verás" - Entonces no prometo nada - ¡¡¡Cotilla!!! -

lunes, 23 de septiembre de 2013

Hoy ha quedado confirmado que Pascualita ha engordado ¡mucho! Mientras desayunábamos la abuela y yo, ha tomado impulso y ha saltado a la mesa de la cocina. Pero no ha sido un salto bonito, elegante y armonioso. Ni siquiera ha caído con gracia. Por poco se parte la crisma con el canto de la mesa y luego ha botado como una pelota. No se podía parar. Los michelines la hacen parecer de goma. Finalmente ha chocado contra el plato del pan tostado, ha rebotado y ha caído dentro del tarro de la miel. - "¡Pascualitaaaaaaaa. Me has puesto perdida, coñe!" - Ha intentado sacarla con los dedos, luego con una cucharilla pero la sirena se escurría y volvía a caer. - "¿A ver si la puedes sacar tú?" (me dijo)

Cogí un tenedor - "¡No es una aceituna, mala entraña!" - Es para que escurra la miel, abuela. - Pero cuando Pascualita se dio cuenta de que la estaba sacando, me enseñó los dientes. - ¡No quiere que la saque! - "Pues hay que hacerlo. ¿no ves que se va a ahogar?" - ¡Se está comiendo la miel! - "¡Sacala, corre, que no cabrá en el traje de la boda!"

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaaa! ¿Otra vez hablando de la boda? ¡Que pesada eres, hija! Y lo que nos queda por aguantar ¡Hay más vida a parte de la tuya, querida! - ¿Qué le pasa a ésta, abuela? - "Que hace tiempo que no la riegan" - No sé para qué pregunto. - "¿No ha ido bien el negocio, Cotilla?" - ¡No me hables! Y eso que me he comprado una camiseta verde y un embudo blanco en la tienda de los chinos del señor Li - "¿Para qué?" - Para arrimarme a los manifestantes de la marea verde sin levantar sospechas - ¿Qué ha echo con el embudo? - ¡Colgármelo al cuello con una cuerda! - ¿Se ha manifestado con ellos? - ¿Yoooo? Si no tengo hijos, nietos ni sobrinos. Y mis tiempos de colegio me pillan muy lejos... He ido a lo mío. A "trabajar". En las aglomeraciones es cuando más rendimiento saco - ¡Seráaaaaaa...! - No te subas a la parra que no he rascado bola. ¡Están tiesos! Pierden 100 euros cada día ¡¡¡cada día!!! Ya me gustaría a mí encontrarlos... Y todo porque los niños tenga una enseñanza mejor... Que gente más rara. - "No olvides que son maestros" - Ya... menos mal que yo no lo soy ¡¡¡100 euros diarios!!!... Estoooo... - ¿Qué ha echo ahora? - ... Me da vergüenza decirlo... A una maestra le he... - ¡Ay, Dios! - ...le he... metido 10 euros en el bolsillo. Como se entere mi ídolo Bárcenas, me repudiará. - "¡Que le den morcilla! Ahora mismo vamos a brindar por ti ¡Niña, saca el chinchón!" - ¡De mil amores!

domingo, 22 de septiembre de 2013

- ¡Que rica está la ensaimada de los domingos, abuela! ¿Será porque, al no tener que ir a trabajar, la saboreo más? - "¡Porque está echa al horno de leña, boba de Coria!" - ¿Cómo todas... no? - "¡Y es más cara!" - ¿No me digas que los domingos las suben de precio? - "No pensaba decírtelo porque es mentira" - ¿Entonces los domingos las traes de otro sitio? - "Sí, señora. Del horno. No del súper" - ¿Por qué no las traes siempre del horno? - "¿Qué parte de la corta frase "son más caras" no has entendido?" - Bueno... de todas maneras tienes que reconocer que tengo el paladar bien educado jejejejeje Distingo unas ensaimadas de otras y no creo que sea una cosa fácil. - "Menos mal que la neurona te funciona, aunque sea al ralentí. Así nunca podrás ser Consellera de Educación" - ¿Por qué? - Para eso tendría que tenerla muerta, como la tiene la mujer que ocupa ese puesto. Aunque, estando en crisis como estamos, podrían haber usado una marioneta y nos saldría más barato"

Para estupor mío, la abuela cogió a Pascualita, acercó a Pepe y les contó: - "Ya tenemos fecha para la boda: el 28 de Diciembre" - ¡Son los Inocentes! . - "Un día como otro cualquiera" - Os harán muchas inocentadas... No me parece el día más apropiado. - ¿Preferirías el 2 de Noviembre, Día de Difuntos? - ¿Es que no hay más fechas en el calendario? - "En el calendario sí, en la agenda de la Catedral, no" - ¿Y el día de Navidad? - "Se come en familia" - ¿Nochebuena? ¿Nochevieja?¿Año Nuevo? ... -"¡Calla ya! Además, no estoy hablando contigo, pesada... ¿Y a vosotros qué os parece?" - ¿A éstos dos?... ¿Les pides opinión a ellos y a mi no? - "Porque son más coherentes que tú" - ¡No me lo puedo creer! - ¡Avemariapurísimaaaaaaa!... ¿qué es lo que no se puede creer ésta? - "Que no le pida opinión sobre la fecha de mi boda" - ¡Ni se te ocurra! Es más corta que las mangas de un chaleco y lo mismo te sale por peteneras. - ¡Pues quiere casarse el día de los Inocentes! - Jajajajajaja ¡Bien pensado! Menuda inocentada para el pobre Andresito! - "¡Eso había pensado yo!" jajajajajajaja

- Mira que bolso más apañado he encontrado en un contenedor. Lo llevaré a la boda. - ¡¿Esa birria?! - ¡Ya salió la entendida! Lo principal es que es grande y holgado. Ideal para bodas de postín y carteras llenas. - ¡¡¡Abuela!!! que no venga. - ¡Claro que voy a ir y me lo pienso pasar muy bien pero, antes es la obligación que la devoción y yo soy muy cumplidora con mi trabajo. ¡Y no me eches la culpa! La tienen los Pinochos que suben los impuestos y mi pensión es cada vez más corta... Por cierto ¿qué comemos hoy? - "Cocido madrileño" - ¡Niña! ves poniendo mesa para tres. Yo voy por el chinchón -

Pascualita se asomó al borde de la pila bautismal - "Mírala, que bonita es (dijo, embobada la abuela... y eso que aún no había probado el chinchón) La pena es que tendré que cambiarle el acuario" - Por qué. - "Me hace ilusión bautizar aquí al niño que tengamos Andresito y yo" - ¿El que vendrá por vitro-CERÁMICA? - "Siendo de padres ricos, qué menos que hacerlo en una pila bautismal milenaria"



















sábado, 21 de septiembre de 2013

-Abuela, desde hace unos días has aliviado el luto. - "¿Lo dices por la camiseta verde? aunque no lo parezca, también es luto. Hay muchas cosas por las que llorar" - Perdona, pero no hace falta que me des el mitin. Lo mío era hablar por hablar. - "¡Ya salió la egoísta!" - No, no es egoísmo ¿cuándo he sido egoísta? ¡Nunca! Es que no me importan los problemas de los demás. - "¿Eres féliz?" - Bueno, relativamente... Lo seré más cuando pueda vivir en la Torre del Paseo Marítimo. - "Ahí viviré yo, guapa" - ¿Por cuánto tiempo? - "Tengo más vitalidad que la Duquesa de Alba"

Hay cosas que no se le pueden decir a la abuela sin que se enfade. Tiene el genio muy corto y se vuelve rencorosa. Y ahora está enfadada. - ¡Abuela, no me quites es croasán! - "Coge pan de ayer, total lo tienes que mojar en el col... ¡en la leche!" - ¿Tampoco puedo ponerme cola cao? Te recuerdo que todo esto lo pago yo. - "Y yo te recuerdo que quien administra la miseria de euros que me das, soy yo" - Puedes ahorrar no invitando a la Cotilla que come por siete. - "¿Te estás oyendo? Cada día te pareces más a la Ministra de Sanidad. Es tan rácana que quiere cobrarles las medicinas a los enfermos de los hospitales" - ¡Bien que hará! Esas medicinas las pagamos todos y a mi no me han pedido permiso...¡¡¡Aaaaaaaaaaayyyyyyyyyyyy!!! - Apenas me dejó terminar la frase y me tiró a Pepe a la cara ¡que sufrido es el pobre! - "¡¡¡Mato, más que Mato!!!" - ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaa !No grites tanto que se te oye en la calle. Mátala si quieres pero no le des tres cuartos al pregonero... ¿Quieres que te ayude?

Cuando la Cotilla supo que las intenciones de la abuela no eran las de matarme (de momento) quedó contrariada -Vaya, ya me había echo ilusiones. - Ahora mismo la voy a denunciar al Municipal - Si no te he echo nada... - Por la muerte de mi abuelito. - Ay, boba de Coria jejejejejejeje entonces denuncia también a tu abuela.  - Ella fue inducida por usted. -Jajajajajajajaja  (Las dos amigas se partían de risa) -¿Ya ha bebido chinchón tu nieta? - "Déjala, que no tiene arreglo... ¿Qué te apetece comer hoy" - Salieron juntas de la cocina, como si nada hubiera pasado. Entonces la abuela, dando media vuelta, me gritó - "¡¡¡Toma!!!" - No supe reaccionar a tiempo y Pascualita se estampó contra mi cara agarrándose con los dientes a la parte más saliente, mi naríz - ¡¡¡Aaaaaayyyyyyyyyyyyyyyyy Maldita abuelaaaaaaaaaa!!! - ¿Te llama tu nieta? - "Parece que sí. Pon dos chinchones que ahora vuelvo" - Entró y me arrancó a la sirena. Todavía lloro al recordar el dolor que sentí por los desgarros. Me refugié en mi habitación al tiempo que oía a la abuela - "¡Ya está! Le he quitado una cosa que se le había pegado" - Chilla como un cerdo jajajajajaja - "Es taaaaaaaaannnnnn exagerada... ¡Salud"


viernes, 20 de septiembre de 2013

La abuela está teniendo unos días negros. Solo ve el vaso medio vacío.Estoy segura que son los nervios pero ya me tiene un poco cansada. Y a Pascualita, que en cuanto la ve acercarse, se esconde entre las algas del fondo para que la deje en paz. Si no la molesta para probarle un traje o un gorro, lo hace para contarle sus neuras y descargarse del agobio. El pobre bicho queda echo fosfatina porque la estruja, la retuerce... pero no le enseña los dientes. Eso me da rabia porque si se lo hiciera yo estaría señalada por todo... ¿oh no? Tal vez me estoy dejando llevar por los prejuícios... creo que tampoco me mordería a mí. Hemos vivído muchas cosas juntas. La he salvado de situaciones extremas... ¿Cómo va a morderme? ¡Imposible!... ¿Y Pepe? Ese menos. Tiene mejor carácter. Es una persona callada, reflexiva... además, no tiene nada contra mí. Decididamente, en ésta casa, salvo con la abuela, estoy a salvo.

Como el movimiento se demuestra andando, cogí a Pascualita y la estrujé como hace la abuela y luego le retorcí la cola... ¡Y luego saltó a mi cara y me dio un mordisco en la nariz que me hizo ver el firmamento entero - ¡¡¡Aaaaaaaaaayyyyyyyyyyyyyyyy!!! ¡La mato, la mato! - "¿Qué le has echo?" - ¿Yooooooo?¡Ha sido ella quien me ha atacado! - "Nunca lo hace, a menos que tenga una buena excusa para ello" - ¡¿Por qué no te muerde a tí?! - "Porque soy la Jefa... cosa que tú olvidas muy a menudo... Además, no me cargues con tus problemas porque estoy abatida" - Que bien hablas, abuela. como se nota que te casas con un aristócrata. - "No olvides que estoy muy cultivada" - ¡Sí! como una lechuga jajajajajajaja -

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaaa! ¡Huy, que cara tiene éstaaaaaaa! ¿Qué te ha hecho? - Oiga, tía bruja, que la atacada soy yo. - Van a operar al Rey... ¿crees que le cobrarán los medicamentos en la clínica? - "¡Claro! Si hay que pagar, pagará. Aquí, o todos moros, o todos cristianos... Siento que no puedan operarme. Tal vez me tocaría estar en la misma habitación que el Rey" - ¿Tu crees? - "¿Por qué no? En la Seguridad Social todos somos iguales" - ¿Estás en lista de espera? ¡Pues tienes para rato! - "¡No! Esa es la pena. Que no tengo nada de qué operarme" - ¿Por eso estás mustia? - "¿Te parece poco?"

Cuando le da la angustia vital, es inaguantable. Así que le he dicho que prepare unos tacos de jamón, aceitunas, patatillas y unos chichones on the rocks... No es que yo sea egoísta, es que a la abuela le gusta asumir el papel de víctima jejejejejeje y yo me aprovecho ¡Claroooooooooooo!

jueves, 19 de septiembre de 2013

He encontrado a la abuela llorando por los rincones; la casa patas arriba; la ropa que le han dejado para elegir la que llevará el día de su boda, tirada aquí y allá y lo peor de todo ¡la comida sin hacer! - ¡Abuela! ¿Qué te pasa? - "¡Soy una desgraciadaaaaaaaaaaaaa!" - Me estás preocupando... ¡no estrujes a Pascualita! - Tenía a la pobre sirena en la mano y lo mismo la acariciaba que le retorcía la cola. - ¡Te va a morder! - "¡¿Y qué?!" - Dámela que, al final, tendremos una desgracia... ¡y a Pepe también! ¿Pero qué te han echo estos dos? - "¿Estos? Nada, pobrecitos míos... ¡buaaaaaaaaaaaaa! ... ¡Ya no me caso. Ya no me caso!" - ¿Por qué? ¿Quieres que la Torre del Paseo Marítimo sea para otra aprovechada? - "¿Insinúas que lo soy yo?" - ¿Yooooooooooo? ¡Dios me libre de ello!

No podía calmarla. Iba como una loca de la Ceca a la Meca. - ¿Te has peleado con Andresito? - "Noooooooooooo" - ¿Entonces, lo has pensado mejor y ya no quieres pasar por el altar? - "¡Noooooooooooo!" - Abuela, no te entiendo... ¡¡¡Para ya de dar vueltas, coñe!!! - ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaaa! ¡¿Qué le has echo a tu abuela?! ¡¡¡Te voy a denunciar!!! - ¡A callar, tía petarda!... Anda, abuela, cuéntamelo - "Andresito... no quiere... (aquí se sorbió los mocos ruidosamente) ...  animales en su casaaaaaaaa... ¡buaaaaaaaaaa! y a Pepe tampocooooooo porque le da grima..." - ¿Por eso lloras?... Ahora entiendo de donde le viene la tontería a tu nieta ¡de ti! Si no tienes animales ¿a santo de qué lloras?... en cuanto a Pepe, que quieres que te diga, le aplaudo el gusto a tu novio. - "¡¡¡Pero yo quiero a Pasc... (una patada mía bajo la mesa de la cocina, le devolvió la razón y el entendimiento) ¡ejem, ejem!... Hay, perdonad, deben ser los nervios previos a la boda" - Sí, sí (la Cotilla puso cara de entendida) lo que pasa es que no puedes vivir sin ese Pascual de las narices. Vamos a ver ¿es rico? porque si no lo es, adiós muy buenas. - "Ay, Cotilla, las cosas nunca son blancas o negras, hay matices aunque tú, como eres más bruta que un arado, no lo puedes entender" - Lo que entiendo es que tu novio está forrado y el tal Pascual para ser que no. O sea que, blanco y en botella: te quedas con el rico y salimos ganando todas. - ¡Amén! - (dije yo) Y ahora, para celebrar que la razón ha vuelto al cerebro ofuscado de la abuela, vamos a brindar con chinchón (y suspiré aliviada)

Estábamos ya un poco achispadas cuando la Cotilla ha lanzado la siguiente pregunta: ¿No decían... ¡hip!.. en la mili que a un español ... ¡hip!...el valor se le supone? - "¿Es un jeroglífico?" - ¿Va a hacer la mili?- Entonces nuestro Pinochoooooo,... ¡hip!... que es español, no debe haberse enterado de eso. - "¿Quizás ya no le pilló la mili?... ¿por qué? - Porque estaba invitado a... ¡hip! ... la apertura del Curso Académico de la Universidad, donde... además... ¡hip!...  le esperaba una buena bronca y no ha ido. - "¿Seguro? Huy, huy, huy... No debe conocer esa frase" - Será eso...

miércoles, 18 de septiembre de 2013

Pascualita no para de suspirar. No sé que le estará pasando. Dice la abuela que debe ser su modo de estornudar porque, con éstos cambios de tiempo, se habrá constipado... Dudo que un pez estornude, aunque también estaba segura de que no suspiraban... ¿Estará enamorada? Pues ya se apañará. No vuelvo a traerle un pretendiente para que se lo coma. Mejor le pongo la foto de un atún cachas o un delfín saltarín y que vaya haciendo boca. - "Por un perro que maté, me llamaron mataperros" - me dijo la abuela a bocajarro. - ¿A qué viene eso? - "Que la pobre solo se ha comido a uno" - ¿Ya no te acuerdas del pobre Ataúlfo, el pececillo de la Cotilla? - "Pero ese no era un pretendiente jejejejeje ¡menuda birria!" - Sería una birria pero Pascualita no le hizo ascos y solo dejó alguna escama aislada flotando en el agua. - "¿Qué te cuesta ir a la Lonja y traerte un pez, guapo y robusto?" - ¡Mucho! Levantarme con las claras del día, en primer lugar y luego sentirme mal por haber participado en el asesinato del pobre bicho a manos de la antropófaga ésta. - "¡No hables así de ella, pobrecita!"

Como si supiera quien sería la tonta de la casa que tendría que ir a por un pez presentable, la sirena saltó de su pila bautismal hasta el pan con aceite y tomate que me iba a comer para desayunar. Luego reptó hasta mí y me hizo lo que la abuela llama "sonrisa" echándole mucha imaginación y yo le llamo máscara terrorífica. Las mandíbulas de pequeñísimo tiburón, se abrían y cerraban haciendo un ruido amenazador - "¡Miraaaaaa, que monaaaaaaaaa! ¡Te está sonriendo! ¡¡¡Dile algo, sosa!!! - ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaaa! ¿A que estás hablando de tu nieta? ... Bueno, ya podéis darme los 20 euros del cuadro. - "¿Tú quieres comer paella?" - ¡¡¡Chantajista!!!

- "Hablábamos de peces..." - Ay, mi Ataúlfo. Muchas veces me acuerdo de él...- Cuando le apetece caldo de pescado jejejejejeje - ¡¿Pero cómo se puede ser tan insensible?!... además, era tan pequeño que no daba para mucho. - "Dejémonos de tristezas... ¿Alguien quiere un chinchón y unas olivas?"

martes, 17 de septiembre de 2013

He tenido una discusión, de buena mañana, con la Cotilla y la abuela, como es natural, se ha puesto de su parte.

Estaba levantándome de la cama cuando la vecina a entrado como una furia en mi cuarto. Me ha dado un susto de muerte. - ¡Ya me estás devolviendo los 20 euros de la camiseta! - ¡¡¡Abuelaaaaaaaa!!! ¿Qué hace aquí esta bruja? - "Viene a reclamar lo suyo" - ¡Tramposa! ¡Me engañaste! No eran manchas de camuflaje sino de ¡cola cao! - Que vaaaa... ¿Quién le ha contado ese cuento? - Tu abuela. - Se supone que la familia debe estar unida. - "No puedo consentir que engañes y mientas... ¿dónde has aprendido esas cosas? Yo no te las he enseñado" - Me has educado en tus valores. - "¡No levantes falsos testimonios! - ¡Que cruz tienes con ésta nieta!

La discusión ha seguido en la cocina donde la Cotilla ha aprovechado para desayunar de gañote - Pónme un café con leche doble (le dijo a la abuela) y tráeme dos croasanes. - ¡Que cara más dura! - ¡Mira quién fue a hablar! ¡Dame mis 20 euros! - Van a ir por todas las veces que come en casa por la cara... Mire si le saldrá barato. - Cuando la abuela vino de la panadería, seguíamos con nuestra guerra particular. - Vale, pues si no me los das tú, me los dará tu abuela. - "A mi no me metáis en vuestros trapicheos"

Mientras comía, la Cotilla no dijo nada. Parecía concentrada en sus cavilaciones. Pascualita asomaba la cabeza entre las algas de la pila bautismal y yo deseaba que saltara sobre la vecina y le diera un escarmiento pero no lo hizo.

A mediodía la vecina se presentó con un cuadro.- Te lo vendo por 20 euros (me dijo) - No se da por vencida ¿verdad?  ¿Para que quiero un cuadro vendao? jejejeje ¡Aaaaaayyyyyyy! Abuela, ya se que el chiste es malo pero no me des capones. - "Eres la vergüenza de la familia... A ver ese cuadro...¿Lo ha pintado un crío?" - Lo habrá robado de una guardería (dije con rencor) - Estaba tirado en un contenedor... Los he visto más feos y además, no está roto... ¿qué. Me lo compras? - "¡Cómpraselo de una vez y acabemos con esta murga" - Vaaaaaale... Págale, abuela... con el billete que me has birlado esta madrugada. - "Lo he cogido para que no lo perdieras"

Mientras comíamos, en la tele salió una noticia rocambolesca sobre un Miró desaparecido del museo hace ya un año y medio sin que "nadie se enterara" - "Huyyyyyy, que mal me huele estoooo jejejejeje Alguien ha pagado un favor con esa pintura"... - ¿Tú crees? - "¿Cuántos cuadros habrá en ese museo para no darse cuenta de que falta uno?" - ¡¡¡Mirad!!! (en la pantalla salía el cuadro perdido) ¿Dónde lo he visto? (dijo yo, pensativa, hasta que me fijé en el cuadro que acabábamos de colgar en la pared del comedor, en el clavo del calendario de los bomberos cachas) ¡¡¡Cotillaaaaaaaaaaa!!! - Juro que lo he encontrado en un contenedor... - La abuela la amenazó con quitarle el plato de calamares rellenos - que está junto a una empresa de transportes... ¡no me quites el plato. Lo diré todooooooo! He ido a "limpiar" algunas oficinas del Polígono y en una de ellas estaba el cuadro en la pared. Lo he cogido porque me ha gustado el marco... ay, ay, ay... Menuda la que os va a caer en cuanto se entere la policía. - ¡Pero si lo ha robado usted! - Aquí tengo los 20 euros que me habéis pagado por el. Habéis comprado mercancía dudosa. Pero no a mí porque, ahora mismo dejo el dinero en vuestra casa y me largo. - Abuela, llama al Municipal, mientras yo llamaré al ánima del abuelito... jejejejejeje

lunes, 16 de septiembre de 2013

En la cocina, a la hora del desayuno, ha reinado el verde de la esperanza. Tanto la abuela como yo llevábamos las camisetas de Crida por la Escuela Pública y eso que no nos habíamos puesto de acuerdo.

Mientras movía mi cola cao, he visto por el rabillo del ojo, una mancha verde sobre la mesa. Hasta que no pasa una hora desde que me despierto, lo veo todo borroso. Es como si estuviera en el Limbo, antes de que el Papa anterior lo quitara. Así que me he esforzado en centrar la vista y ¡era Pepe! La cabeza jibarizada llevaba una gorra con la misma leyenda que nuestras camisetas. - Abuela ¿esto es cosa tuya, verdad? - "Sí, hija, por algo soy la única artista de la familia" - ¡Me encanta!

En cuanto cogí a Pepe, un misil tierra-aire verde, aterrizó de lleno en la taza de mi desayuno y la onda expansiva me dejó chorreando. - ¡Como se puede ser tan pequeña, tan fea y tan celosa! - "Que bien te has retratado" - ¡Estoy hablando de la sirena de las narices! Mira cómo me ha puesto. - "Siempre vas echa un adefesio, así que no le eches las culpas a la pobrecilla" - Es imposible que me siente bien el desayuno pero, por otro lado, la familia que reivindica unida, jamás será vencida. Así que me he echo otro cola cao porque el anterior lo había acaparado la puñetera sardina... Que poco le gusta a la abuela que llame sardina a su amiga jejejejejeje.

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaaaa! ¡Yo también llevo la camiseta verde de Crida! - ¿No irá a limpiar cepillos con ella puesta? - ¿Cómo que no? Hay que apoyar a la Escuela Pública donde sea. - Lo digo porque, con ese color verde, la van a pillar. - Si sales a la calle verás que hay muchas camisetas como ésta... ¿La tuya es de camuflaje? Me gusta ¿Dónde la has comprado? - Se la vendo por 20 euros... y le hago rebaja. - ¿En serio? No me esperaba eso de ti... Vale. Quitatela para que no apeste y cuando venga de "trabajar" te la pago. - ¡Oiga, que me ducho todos los días, no como usted! - Porque no me llega la paga para el recibo del agua y el de la luz... Fíjate en mi ídolo, Bárcenas. Necesita 5.000 euros al mes para pagar esas cosas...  - ¡Menudo ejemplo! - ¡El mejor! ¿A ver cuándo vas a tener tú en Suiza lo que tenía él? Y trabajaba de lo mismo. En una oficina. - ¡A mi no me compare con ese tío! - Que tonta es tu nieta. Prefiere lo mediocre en lugar de aprender de los maestros. - "Sí, hija. Nació así"

Al final se ha llevado la camiseta "camuflada" porque quería ir a la puerta del Consolat de la Mar a gritar consignas contra el President. Y quería pasar desapercibida. - Pero luego me la paga. - Está mojada. - Es que aún no se le ha secado la tinta... ¿Qué importa que la vean si va a defender los derechos de los críos? - Bueno, es que... ya que estoy allí... en medio de la aglomeración, he pensado en "trabajar" un poco los bolsillos... - ¡¡¡Cotilla!!! ¿Es que no tiene vergüenza? - ¿Es que no quieres cobrar? - Ante este razonamiento de peso... ¿que podía decir yo?

  

domingo, 15 de septiembre de 2013

- Abuela, a partir de mañana tendré vacaciones - "¿Para qué?" - Para ir a la playa. - "Jejejejejeje Eres el último mono de tu empresa. En septiembre... pobrecilla ¡Pero si ya tienes el edredón puesto en la cama!" - Iré a la playa a tomar el sol... - "Vas a coger un constipado. En septiembre y a tú edad..." - ¿Mi edad? Aquí, la que tiene una edad eres tu. Aún estoy en edad de merecer - "¡Pues aprovecha el tiempo, boba de Coria!... aunque, merecer... mereces poco" - ¡Abuela! - "Si es que eres más sosa que una sopa sin avecrem y encima, en septiembre no podrás ligar. El ganado extranjero ha venido en agosto y este mes es más indicado para la Tercera Edad" -  Ahora vienen los que tienen la cartera llena. - "Pero esos vienen acompañados" - Alguno habrá suelto por ahí. - "Ni con lupa lo encontrarás" - Eres única dando ánimos...

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaaa! ¿Qué es lo que le has dando a tu nieta? ¡No seas tonta! No le des nada que luego, cuando te quedes a dos velas, te dará una patada en el culo y si te he viso, no me acuerdo. - ¡¿No pensará comer hoy en MI casa, verdad? - Si la comida la hace tu abuela, sí. - ¡Tararí, que te vi! Si no hace más que sembrar cizaña, tía petarda ¡Abuela, no le pongas plato a ésta tiparraca! - "¡Parecéis dos niñas!" - ¿Verdad que sí? yo por lo menos, porque tu nieta, con este carácter que tiene, parece que nos lleva diez años (dijo tan campante la Cotilla) - "Por cierto, ya que sois, más o menos, de la misma edad, mañana podrías acompañar a la vecina a limpiar cepillos de las iglesias" - ¡Buena idea! Así cundiría más el trabajo.

Fui a por la botella de chinchón para ver si la abuela le había dado un tiento... o varios. - ¿Te estás oyendo? ¡Como se entere mi futuro abuelito de que quieres pervertirme, pondrá el grito en el cielo! - "Que ponga el grito donde quiera mientras deje la cartera aquí jajajajajaja" - ¡Di que sí! (jaleó la Cotilla) ¡Escucha y aprende, Blancaflor!... Y no te lleves la botella que, ya que estamos... le haremos los honores. Por cierto ¿qué comemos hoy? - "¿Hace una paella?"

Me ha entrado la rebeldía. Así que he cogido el broche de la abuela, he colocado en el a Pascualita y me lo he puesto, bien visible. Para más inri, le he dado unas cuantas gotas de chinchón (a las que nunca dice que no) y ha terminado mareada. Mientras comíamos, la Cotilla se ha fijado en el broche - ¿Con qué era eso lo que le has dado? Ya que no lo tiras a la basura, has echo bien en regalárselo... ¡Que feo es!... Oye, ¿se está moviendo? - No beba más, Cotilla, que acabará viendo el fantasma del abuelito. - La mujer se santiguó tres veces seguida - !No mientes la soga en casa del ahorcado! - ¿¡Lo ahorcaron?! - ¿A quién? - Al abuelito. - ¿Qué dice ésta loca? (preguntó a la abuela) - "No le hagas caso y come" - ¡Se ha movido el broche. Estoy segura! - Entonces Pascualita empezó a mover la cabeza de un lado a otro, cada vez más deprisa, mientras se balanceaba. - ¡¡¡Míralo!!! - Cotilla, está viendo visiones. - ¿Visiones? ¡Ahora abre la boca esa especie de gusano asqueroso con pelambrera! - ¡Huy, lo que le ha dicho al abuelitooooo! - "¡Lo oigo, lo oigo (grito, divertida, la abuela) dice ¡No al TIL. No al TIL!" - ¡Me voy! ( la Cotilla temblaba) - "¿No quieres postre? Hay natillas" - ¡Mete las mías en un taper que me las llevo a casa! ¡¡¡Aaaaaaaaahhhhhhhhh, tiene dienteeeeeeeeeeeeesssssssss!!! - Y salió corriendo - "¡Cotillaaaaaa, que te dejas las natillaaaaaassss! jajajajajaja







sábado, 14 de septiembre de 2013

Espatarradas nos hemos quedado la abuela, la Cotilla y yo, delante de la tele después de ver la etapa de la Vuelta de hoy. Madre del Amor Hermoso ¡Que cuestas! Si es que solo de verlos subirlas nos hemos reventado. El Anglilu ¡la madre que parió a los que se les ocurrió ponerlo en la carrera! Eso no es bueno para la salud.

Ni siquiera hemos dormido la siesta. Era un puro sufrir. Un ¡Ay! continuo viendo a montones de energúmenos cerrando la carretera y mirando a la cámara de la tele sin ver que, por detrás, venían los ciclista con los pulmones saliéndoles por la boca. Les hemos dicho de todo ¡cabestros! ¡hijos de tal de de cual! ¡Y esas banderas de todos los pelajes, puestas a un palmo de los ojos de los pobres corredores, que ni las veían de cansados que estaban! ¡Anda y metéroslas donde os quepan! Por Dios, que nervios hemos pasado.

No hacíamos más que beber chinchón para calmarnos. - Yo tenía a Pascualita en mi regazo, pensando que la Cotilla se dormiría como todas las tardes, pero hoy no. Parecíamos tres búhos. A mi me ponen frenética esas avalanchas y aunque estoy segura de que toda esa gente es muy tranquila en su casa, cuando ven un ciclista les sale el monstruo o el payaso que llevan dentro y no hay quién los aguante.

La abuela ha dicho que eso no le pasaría a ella jamás. Y la Cotilla, tres cuartos de lo mismo. Ellas saben comportarse como señoras que son. Pero cuando han visto lo bonita que estaba la carrera en los últimos kilómetros, gritaban como posesas: - "¡¡¡Puritooooooooooo, vamos, vamoooooooooos!!!" - ¡¡¡Valverdeeeeeeeeeee que te quedas, jodío!!! - Y no hacíamos más que saltar de las butacas - ¡¡¡Ay, que lo tiraaaaaaaaaannnnnnnn, animalessssssssss!!! - "Pon un chinchón, niña, que me va a dar un infarto" - ¡Y a mí! (añadía, rauda, la Cotilla) - No caerá esa breva.

Cuando ha terminado la etapa, con la cumbre cubierta de una niebla espesa, londinense, hemos llorado de emoción con el ganador de la etapa. Y no era para menos. Había que sacar fuera todo el estrés acumulado, los nervios, la pasión, la mala leche... Bueno, finalmente, nos hemos relajado y me he dado cuenta de que estaba algo achispada jejejejejejeje - "Estoy tan cansada como si hubiese subido yo el dichoso Anglilu" - Menos mal que ya nos hemos comido los canelones. - "Si tuviese que hacerlos ahora, comeríamos pamb oli" - Abuela... no está. - "¿Quién?... ¡Oh!... Ha sido por saltar ¿a qué sí?" - ¿Quién no está? - Son cosas nuestras (dije, preocupada) - ¿Con la edad que tienes, aún no sabes que secretos en reunión son de mala educación?  

Pascualita no ha aparecido. En cuanto la vecina se ha ido la hemos buscado por todo pero ha sido inútil. Antes de irse la abuela al El Funeral me ha dicho que la avise si aparece... Estoy triste y ya no sé donde mirar... Antes de acostarme he ido a cerrar las persianas del balcón y ¡allí estaba el bicho! ¡haciendo campaña para la Escuela Pública y en contra del TIL! Subida a la barandilla, sobre la camiseta verde que dice CRIDA PER LA ESCOLA PÚBLICA que tenemos colgada allí, viendo pasar la gente de la calle y haciendo, de vez en cuando, la señal de OK.


viernes, 13 de septiembre de 2013

- Hoy empieza el colegio. Ya no habrá dónde aparcar - "¿Y qué más te da sino tienes ni hijo ni coche?" - Es lo que se dice en estos casos. Y espera a que llueva a la entrada o a la salida, ¡menudo caos! Ni andando puedo pasar. Todo son paraguas, carritos, coches, niños llorando, otros gritando; mamás hablando con amigas... luego yo llego tarde al trabajo. - "Que cuajo tienes. ¡Levántate antes, alma de cántaro!" - ¿Para qué, si hasta las ocho no me traes el croasán? - "¿Es una indirecta? ¿Ahora quieres croasán? ¿No decías que como el pan tostado no hay nada? ¡Cómo vas a tener novio si eres una indecisa!"

- ¿Has cogido a Pascualita? - "No. Estará durmiendo" - ¡No está! - "Ya estamos dramatizando. Eres igualita que tu abuelo. No es raro que le pasara lo que le pasó" - Un sudor frío recorrió mi espalda - ¿No... no pensarás hacer lo mismo conmigo? - "No me tientes" - Pobre abuelito. - "¿Pobre? ¿Por qué dejé de prepararle el desayuno y tuvo que hacérselo él  todas las mañanas?" - Ah, ¿era eso? ... ¿Dónde estará este bicho? Hay que encontrarlo antes de que llegue la Cotilla, no vaya a pisarla. - Pascualita no aparecía por ningún rincón de la cocina. De repente la abuela se dio un manotazo en la frente - "¡¡¡Se me había olvidado!!! La he puesto delante de la tele para que aprenda inglés escuchando los dibujos animados" - ¡Abuela! Es un pez. - "Mira que eres negativa" - En una de las butacas estaban la sirena y Pepe frente a la pantalla. - ¿Pepe también aprende inglés? - "Bueno... ¿quién sabe? Al fin y al cabo, es una cabeza"

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaaa! ¿Nos apostamos algo a que nuestro Pinocho no se baja del burro con el tema del TIL? - "Cinco euros a qué sí" - ¿Cinco euros? que rata eres... Yo me juego dos semanas de desayunar en tu casa, a que no. - No, no, no, (dije yo) Solo faltaba tenerla también delante mientras desayuno. - Esta tropa nos lleva a la ruina. Solo falta que implanten aquí la norma americana... que los ciegos puedan tener pistola y usarla. - "¿Has bebido de buena mañana?" - ¿Tenéis la tele encendida? - "Ehhh.... sí. Estamos aprendiendo... inglés" - Veo que os solidarizáis con los maestros. Ellos también lo tienen que aprender bien para poder dar las clases a los niños... ¡Que mentes más obtusas nos gobiernan!.. Y ya que estoy aquí... ¡¿tomamos un chinchón antes de que me vaya a trabajar?! - ¿A limpiar cepillos? - Más tarde. Primero "limpiaré" los monederos de las mamás, en la puerta de los colegios, mientras se cuentan  el veraneo ... No pongáis esa cara... Está bien ¡os invitaré a un helado!

jueves, 12 de septiembre de 2013

- "Andresito y yo llegamos a un acuerdo muy importante, anoche" - Muy bien, abuela... anda, pasame el azúcar... Gracias. - "Fue en El Funeral..." - El pan no está muy bien tostado...  ya sabes que me gusta que quede morenito. - "Por fin estamos de acuerdo en algo mi novio y yo porque llevamos unas semanas horribles..." - Toma, Pascualita... Abre la boca. ¿Está rico, eh? - "Y creo que a su madre, cuando se lo cuente, le gustará la idea" - Abuela ¿has visto si la escandalosa de la vecina sigue con la cara hinchada? - "Aunque, claro, no es lo mismo que un bisnieto pero, ya que no puede ser..." - ¡Menuda tajada llevaba el marido! jajajajaja... Cuando bajaste la basura, aún dormía en el rellano. - "¡Vamos a tener un hijo!"

La abuela se levantó, puso su taza del desayuno en el lavavajillas y salió de la cocina. Yo seguí un rato más, jugando con la sirena. Y me pareció que había engordado. - ¿Dónde has perdido la cintura, Blancaflor? No vas a caber en el termo de los chinos ni metiéndote con calzador jejejejeje ¡Te quedarás sin ir a la boda, tía petarda! Claro que la abuela también tiene mucha culpa porque te da de todo y en abundancia. ¡Eres un saco sin fondo, Pascualita! o debo decir Pascualotaaaaa jajajajajaja ¡Que fea eres, jodía!

La abuela había empezado el zafarrancho de todas las mañanas y no paraba de entrar y salir de la cocina - "Habrá que buscarle un nombre... Mejor dos, uno de niño y otro de niña... Había uno que me gustaba mucho... pero ahora no lo recuerdo" - ¿De qué hablas abuela? - "De que tenemos que elegir los nombres" - ¿De quién? - "¿Cómo que de quién? ¡Ves como no me escuchas! Luego te quejas de que solo le hablo a Pepe y a Pascualita..." - ¿Cuándo me has hablado? Por cierto, la sirena está echa una vaca.

Hemos tenido un trifulca porque dice que no me entero de nada. Dice que lleva una hora contándome algo muy importante... Si lo fuera me habría dado cuenta. ¡No soy tonta! - ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaaa! ¿Ya estáis liadas? ¿Qué te ha echo la boba de Coria? - "Le estoy contando que Andresito y yo hemos decidido tener un hijo cuando nos casemos y no se entera" - ¡Que cruz tienes con ella! - ¡¿Cómo que vais a tener un niño?! -"O niña" - ¿Cómo? - "¿Cómo que cómo? Como todo el mundo" - Todo el mundo no tiene 86 años. - ¡Casi 87! (puntualizó la Cotilla) - ¿Ya sabéis a qué santo vais a pedirle el milagro? - "Será in vitro" - ¡In vitro cerámica! jajajajaja - No te rías de tu abuela, mala nieta... aunque, un poco de risa si da jejejejeje - "¿Y tú quieres ser la madrina de boda?" (amenazó la abuela a su amiga)

Mientras tomábamos el café, seguíamos con el tema. Y fue al tomar el chinchón cuando tuve una idea. - "¿Hubo fiesta en El Funeral?" - ¡Ya lo creo! Conchi se ha echado un novio extranjero y le estuvo enseñando a bailar Paquito el chocolatero. ¡No paramos de brindar! Al final el pobre rodó bajo la mesa y ahí se quedó porque dijo su novia que así podía apoyar los pies en él para estar más cómoda" - ¿Y entre copa y copa, decidisteis tener un hijo? - "¡¡¡Sí. Y Conchi también!!!" - Hale, pues vamos a brindar por los no-hijos de madres imposibles. - "Que brindis más raro" - A mi también me lo parece pero ¿no vamos a hacerle ascos al chinchón? (dijo la Cotilla)

miércoles, 11 de septiembre de 2013

De madrugada han caído chuzos de punta ¡Que manera de llover! Por eso me he levantado triste pensando que al Verano solo le quedan dos telediarios y entraremos en los meses oscuros, donde la noche se apodera del día a partir de las seis de la tarde. Y se me encoge el alma... y el jersey que acabo de coger del tendedero ¡Se me olvidó recogerlo anoche!

Pues sí que empezamos bien el día. Y ni siquiera huelo a pan tostado... porque la abuela no está en la cocina sino en la terraza. Ha salido con paraguas para ver el pluviómetro - "¡Que gran invento ese chisme! Han caído 24 litros por metro cuadrado ¿Te imaginas? ¡24 litros!" - ¿Y? - " ¿No ves el negocio que podemos hacer?" - ¿Piensas vender agua de lluvia? - "No se me había ocurrido... Me refiero a que podemos predecir el tiempo que hará con el fraile Paco y decir, exactamente, los litros caídos" - ¿A quién se lo decimos? - "Al vecindario" - ¿Para qué? - "Para que lo sepan" - Abuela, tuéstame el pan, anda y déjate de negocios que dentro de poco vas a ser rica. - "Es verdad... Es que no me hago a la idea"

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaa! ¡¡¡Pon algo detrás de la puerta que la vecina de arriba viene a por ti!!! - (gritó la Cotilla) Anoche se le olvidó recoger la ropa del terrado y está chorreando. Dice que la culpa es tuya por poner ese chisme en la terraza que, lo único que hace, es llamar a la lluvia. - "Voy a explicarle que no es así..." - ¿Estás tonta? No me has oído que viene a por ti ¡y trae a su marido que es lo más bruto que ha parido madre! - ¡Abuela, llama al Municipal!

Los porrazos en la puerta no auguraban nada bueno. Cogí a Pascualita, más que nada por tener algo en las manos... un arma, por ejemplo. - "Dice Bedulio que ahora no puede venir. Y que si es cosa de espíritus y almas del Purgatorio, que lo vayamos resolviendo nosotras" - Ya me extrañaba a mí... ¿qué hacemos? - "Voy a abrir. No quiero sentirme prisionera en mi casa" - Pues que vaya tu nieta que, al fin y al cabo, es la dueña y si se escapa una torta mejor que la reciba ella ¿no? - "Si, Cotilla, tienes más razón que un santo"

Antes de que tiraran la puerta abajo, abrí de sopetón y el mendrugo del vecino cayó cuan largo era, a mis pies. - ¡Que me matas al maridooooooooo! (gritó la energúmena de su mujer) - ¿A qué viene este jaleo? (dije muy puesta, disimulando el miedo) - ¡¿Dónde está tu abuelaaaaaaaaaa?! ¡Mira como me ha quedado la ropa por su culpaaaaaaaa! ¡Ahora me la secáis! - Antes de que pudiera impedírselo, tiró el barreño y la ropa que contenía, dentro de casa. Yo hice un amago de cogerla y tiré al aire a la sirena que aterrizó en las narices de la escandalosa.

La mujer subía y bajaba las escaleras, gritando y llorando. Afortunadamente, ningún vecino se asomó a ver qué pasaba porque estaban cansados de oírla. Yo hice el mismo recorrido hasta que pude coger a Pascualita y tirar de ella para arrancarla. La vecina subió a su casa, bizca perdida, chorreando sangre y corriendo como si la persiguiese un perro rabioso. El que no había vuelto a dar señales de vida era el marido que seguía durmiendo en la entrada de casa, tal como había caído. La Cotilla me indicó por señas, que iba bebido. Lo sacamos al rellano, a él y a la ropa. Luego, para reponernos del susto, brindamos con chinchón - "Para que no haya más mentes obtusas" - ¡¡¡Amén!!!

martes, 10 de septiembre de 2013

 La abuela se ha levantado como una rosa y eso que vino tarde y dando tumbos. Al despertarme, toda la casa olía a pan tostado - ¡Hum, que aroma más delicioso! - Mientras desayunábamos me contó que, debido a la sorpresiva fiesta de ayer, la gente no sabía qué hacer ni a donde ir, así que El Funeral se llenó antes de lo habitual. Y estuvieron jugando al bingo. - "Sé de centros de la 3ª edad que batieron el record de permanencia en el club jugando al bingo. Incluso comieron allí para no perder tiempo. Acabarían con el culo cuadrado" - Me imagino... ¿qué hicisteis vosotros? - "En lugar de premios en metálico, los que ganaban elegían el baile que querían bailar y siempre se les agregaban otras parejas" - Estuvisteis modositos - "Sí, hasta que mi suegra propuso un cambio" - ¿Estaba la Momia? - "Se está haciendo asídua... Jugamos al bingo-sex. El que ganaba se quitaba una prenda" - ¡Pero, bueno! ¿A vuestra edad? ... ¿No me digas que hubo quién se quedó en cueros, por favor? - "Pues sí. Al final estábamos en cueros todos jajajajaja" - ¡¡¡Abuela!!!

Pascualita, viendo que no le hacíamos caso, saltó a la mesa de la cocina, se aupó a mi taza de cola cao y se dio un buen baño en ella - ¡Ya estamos otra vez! ¡¡¡Quita de aquí, bicharraco!!! - Antes de que pudiera cogerla entró la Cotilla - ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaaaaaaa! Si yo tuviese una nieta y me llamara bicharraco, ahora mismo ya estaría sin dientes ¡Que cruz tienes con ella! - Entonces, la sirena dio un coletazo y salió despedida hacia la taza de café con leche de la abuela y puso perdida a la vecina que estaba al lado. - ¡¿Quién me ha salpicado?! - La abuela y yo nos miramos con caritas inocentes - "Cotilla, hija ¿estás bien?" - ¿Pero... no ves como me habéis puesto? - Yo no me he movido. - "Yo tampoco" - Mientras discutíamos, Pascualita se zambulló en mi taza y hubo cola cao por todo el vestido de la Cotilla - ¡Otra vez!... ¡Mirad como voy! - Hecha una pena (dije, aguantándome las ganas de reir)

- He entrado limpia en ésta casa, o sea, que me he manchado aquí ¿no? - Ah, no sé. - Ya me estáis pagando la lavandería - "No tengo ninguna obligación moral" (dijo la abuela, muy digna) - ¡Ahora mismo os pongo una denuncia como una catedral! - Y salió echa una furia. Antes de cerrar la puerta tras de sí, preguntó - ¿Qué hay para comer? - "Frito de cordero"

El Municiopal, bastante molesto, interrogaba a la Cotilla - ¿Usted ha visto que le tiraran los líquidos? - Ya te he dicho que no. Pero eso no quiere decir nada... - Si no lo ha visto, no puede acusarlas. - ¿Quién me los iba a tirar entonces? - Con la de cosas raras que pasan aquí, cualquiera sabe...

Mientras discutían, yo trataba de encontrar a Pascualita. Había desaparecido después de desayunar y a saber bajo qué mueble estaría escondida... Hasta que me dio por mirar arriba ¡Allí estaba! colgada de la lámpara y justo encima de la vecina. Tragué saliva. La abuela también la vio y no se le ocurrió otra cosa que hacerle la señal de OK. Entonces Pascualita saltó, segura de que su amiga estaba encantada de que lo hiciera, y se perdió entre la maraña de pelos colorista de la Cotilla. Un segundo después, en aquella cabeza se armó un zipi zape y vimos volar mechones mientras un pequeño pero furioso tornado, enmarañaba el cabello.

La Cotilla lloraba y pataleaba y cada vez que intentaba arrancarse el bicho, recibía un doloroso mordisco. Empezó a correr arriba y abajo del piso, gritando como una loca. El Municipal la siguió hasta la puerta de la calle, la abrió y se largó con el rostro desencajado. Cuando por fin pudimos cogerla, le dimos el infalible chinchón para que lo olvidara todo y pudimos ver, tranquilamente, la Vuelta a España.


lunes, 9 de septiembre de 2013

- "¿Qué haces aún en casa? ¡Llegas tarde al trabajo! A ver si te van a echar ." - No voy a ir (dije sonriendo) - "Vaya. Te has levantado chulita hoy.  Pues si cree que te voy a mantener, lo tienes claro." - Pero si soy yo quién te mantiene a ti. - "Para eso soy tu abuela" - Y te casas con un millonario... - "Exacto. Me casaré YO. Tú a currar hasta que te jubiles jejejejeje ¡que no te queda ná!" - ¡Egoísta! - "Mira, guapa. Si quieres un millonario, trabájatelo, solo así podrás vivir del cuento. ¡Y vete de una vez!" - Es fiesta, abuela.

Me miró espantada y dejó a Pascualita con la boca abierta, esperando el trozo de ensaimada que le acaba de ofrecer. - "¿Qué fiesta? ¡Es lunes! ¡San Lunes, boba de Coria! ¡Tira pa la calle!" - Asómate y verás los comercios cerrados... Te digo que es fiesta. - Agarró a Pascualita y salió con ella a comprobar si yo le estaba diciendo la verdad.

- "¡No me lo puedo creer! ¿Desde cuando es fiesta? ¡Si tengo la nevera vacía! ¿A que lumbrera se le ha ocurrido sacarse una fiesta de la manga sin avisarme?" - Yo estoy encantada... - "Por que eres una irresponsable. ¡Así como está el País no podemos tener tantas fiestas! ¡Y luego queremos que nos den las Olimpiadas!... ¡¡¡Tengo que ir a comprar!!!" - No se va a hundir el mundo porque estés un día sin gastar. Relájate y disfruta.

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaa! ¿Me haces un café con leche? - "¿Me lo pides en inglés o en español?" - ¡Eh!... ahora que lo dices... no lo sé pero ¿da igual, no? - Pues no. De todas maneras, no te hago nada porque estoy relajada". - ¿Has echo una promesa? - "No. Mi nieta me ha dado un consejo y lo sigo al pie de la letra" - ¿Tienes fiebre? ¿Cómo le haces caso, si es más tonta que el que asó la manteca? - "Porque es fiesta" - ¡Que va! Es lunes... ¿no?... ¿sí?... ¿en qué quedamos? ... ¿Es fiesta?... ¿Qué fiesta? ... ¿Seguro? Pues me voy corriendo a misa de doce; hoy toca limpiar cepillos - "Cuando vuelvas, trae hamburguesas o pizza... lo que te apetezca" - ¿No vas a cocinar? - "¿Relajada? ¡Ni en broma"

La Cotilla trajo comida china porque el señor Li, siguiendo la tradición de los comercios chinos, no cierra cuando los demás sí tienen que hacerlo. - Aquí tienes la cuenta (la vecina dejó la mano extendida ante las narices de la abuela, esperando el pago) - "Una persona relajada no tiene la cabeza para cosas mundanas" - ¿No me vas a pagar? ... ¡Pues me lo llevo todo a mi casa! - ¿Nos deja sin comer? - ¡SÏ!

Estoy masticando un mendrugo de pan de ayer mientras intento adormilarme con la Vuelta. La abuela sí que duerme a pierna suelta. Claro, ella cenará muy bien en El Funeral... ¡Anda que volveré a dar consejos!... ¡¡¡Antes me corto la lengua!!!

domingo, 8 de septiembre de 2013

La acera mojada nos indica que ésta noche ha llovido y la abuela se ha puesto de los nervios - ¿No vas a buscar las ensaimadas para desayunar? - "Ves tú si quieres. Yo no me expongo a que la vecina me descalabre." - Podría haber sido peor de haber llovido tierra. - "¡Calla, calla! En mala hora me compré el pluviómetro" - Lo malo no está en el aparato sino en la rogativa que hicisteis en la terraza. Por cierto ¡mano de santo! Los dioses han mandado la lluvia pero, a cambio, nos quitan los Juegos Olímpicos. - "¿Qué pinta Dios en todo ésto? Nunca lo he visto en camiseta y pantalón corto" - ¿Has visto a Dios? - "En los cuadros... ¡¿Tú eres tonta?! ¿Crees que se dejará ver algún día? ¡Ni harto de vino! La Humanidad tiene muchas cuentas pendientes con Él"

La Cotilla nos hadado un susto de muerte. Se ha presentado en la cocina como un fantasma. Para no alertar a la vecina peleona, no ha echo ningún ruido al entrar y en cuanto ha pisado la cocina ha dicho - ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaa! - En ese momento, Pascualita había dado un salto dispuesta a aterrizar sobre la mesa para desayunar con nosotras y la he cazado al vuelo, metiendola en mi bolsillo a la velocidad del rayo. Ha quedado tan desconcertada que no ha pensado en morderme. - ¿Qué hace tu nieta, caza moscas?... ¡Que desastre más grandeeeeee! - "Tampoco es para ponerse así. Ya sabemos que es tonta desde que nació" - Gracias, abuela. - Ahora no hablo de ella sino de los Juegos Olímpicos ¡que penaaaaaaaaaaaa! - "Pero si a ti, ni va ni te viene" - ¿Pero tú sabes el esfuerzo que hemos tenido que hacer para nada? Mismamente Ana Botella. Sus buenos dineros le habrá costado para aprender inglés ¿y ahora qué? - "Podrá venir a dar clase a los niños de Baleares que tienen que aprenderlo, tengan maestros o no" - Está jodío el patio.

En vista de que la Cotilla no hacía amagos de marcharse, puse a Pascualita sobre mi falda y le fui dando trocitos de ensaimada mojada en cola cao.- Tu nieta se estará poniendo la falda perdida ¡Qué cruz tienes con ella! - "No le hagas caso" - Habrá que buscarle un novio activo que la tenga entretenida... un atleta, por ejemplo. Ahora que se les acaba el chollo tendrán tiempo para otras cosas. - "¡Eso es! Y el año que viene ¡bisnieto abemus!" - ¿Crees que será conveniente? ... Imagínate que el niño sale a su madre... ¡Que nueva cruz iba a caer sobre tus espaldas!

sábado, 7 de septiembre de 2013

La abuela se ha sentado a desayunar echando una premonición sobre la mesa - "Va a llover" - ¡Nooooooo! Es fin de semana. - "Lo siento pero van a caer chuzos de punta"  - ¿Por qué tu lo digas? No fastidies, que quiero ir a la playa. - "¿Quién te ha dicho que no vayas?... ¡pero llévate el paraguas jajajajajajaja!" 

He dejado mi vaso de cola cao sin protección contra Pascualita para ir a ver al fraile Paco. Debe estar compinchado con la abuela porque se ha puesto la capucha y marcha LLUVIA el jodío. He regresado a la cocina con una sonrisa de oreja a oreja -¡Ni una gota caerá! - "¡¿No habrás echo un frailecidio con el pobre Paco?!" - No he llegado a tanto aunque no por falta de ganas. Estáen el fondo de un cajón hasta que deje de fastidiarme. - "Quien se mete con el clero, tarde o temprano, sale trasquilado" - En cuanto me senté, el cola cao salió por los aires, duchándome de arriba abajo.- "¡¡¡¿Lo ves?!!!" - Pascualita había dado un salto mortal desde la pila bautismal a mi taza. - ¡¡¡La madre que la parió!!! ¡Sal de ahí ahora mismo, monstruo! - La abuela se partía de risa y la sirena, mirándola, hacía la señal de OK. Solo Pepe permanecía inmutable ante el guirigay que se había formado.

Intenté sacar al bicho con la cuchara y a punto estuvo de darme en el ojo el chorrito de cola cao, envenenado (¡seguro!) que me tiró. -¡Sacala tú, abuela! - "¿Yooooooooooo? ¡con lo graciosa que está! Espera, que voy a hacerle una foto. ¡Que guapa es mi niñaaaa!" 

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaa! ¿Tu nieta es guapa? Ya veo que te pueden los nervios de la boda. ¿¡Qué haces!? - La abuela, para quitar a Pascualita de en medio, no tuvo otra ocurrencia que vaciar la taza dentro de la pila bautismal. - ¡El fregadero está en el otro lado!... ¿De verdad vas a hacerle una foto a ésta? (dijo, mirándome de reojo) ¿Vale la pena?... Que ganas de gastar pilas... Por cierto, mira que he encontrado en un contenedor ¡un pluviómetro! - "¡Qué casualidad. Acabo de comprar uno! Y estoy deseando que llueva para estrenarlo" - ¡Y yo!

Las dos viejas salieron a la terraza de casa, colocaron en el suelo un montón de medallitas, cruces y rosarios y se pusieron a cantar y bailar al rededor. Llevaban la botella de chinchón y se la iban pasando después de cada trago. Era como una película de indios y vaqueros. Algunas vecinas se asomaron a las ventanas - ¿Qué celebráis? - Ya podríais invitar - ¡Dejadnos un poco de chinchón! - "Estamos haciendo la danza de la lluvia" - ¿Para qué? - "¿Para qué va a ser? ¡para que llueva a mares!" - Una maceta se estrelló, peligrosamente, cerca de ellas. - ¡Esto es un aviso! Como caiga un chaparrón, salís de esa casa con los pies por delante ¡Tengo el terrado lleno de ropa tendida, malas pécoras! 

Se han pasado el rato de la Vuelta ciclista, rezando el rosario para que no caiga ni una gota, pero no sé... está el cielo muy nublado...

viernes, 6 de septiembre de 2013

La Cotilla está entusiasmada con su pulsera dorada "Cúralotodo" No se la quita ni para ir a trabajar, a pesar de los consejos que le da la abuela - "Si alguien te ve limpiando los cepillos y se fija en el dorado chillón de tu muñeca, te echarán el guante en seguida" - ¡Como si solo yo tuviese una de éstas pulsera, en toda la ciudad!... Mientras la lleve no puede pasarme nada malo porque está cargada de energía positiva. - ¿No se habrá descargado estando en la basura? - No, lista. Eso solo le pasa si está sobre un televisor. - "¿Y en qué notas que te va bien?" - Me siento más ligera. No me duele la cabeza... Los huesos no me crujen... Incluso me están desapareciendo las arrugas. - Hay que decírselo al Papa Paco ¡esto es un milagro! jajajajajaja - "Ay, Cotilla ¿cuándo has tenido tú dolor de cabeza? Nunca. En cuanto a lo de ir ligera, es por tu dichoso trabajo que, la mayoría de las veces, tienes que salir por pies para que no te pillen... Y en cuanto a las arrugas... ¡que Dios te conserve el oído porque la vista ya la tienes perdida! jajajajajaja"

Antes de comer, convencí a la vecina para que me dejara probar la dichosa pulsera mientras ella iba al baño... Quería hacer un experimento y tenía que estar sola. Dicen que los animales son más sensibles que las personas y sienten cosas de las que no nos enteramos, así que metí la pulsera dentro de la pila bautismal y esperé alguna reacción. Pero no pasó nada. Así que la cogí, la sequé y se la devolví a su dueña que dijo, muy segura de sí misma. - Este ratito que he estado sin ella, me he sentido desprotegida. ¡No la vendería ni por un millón!

Mientras comíamos la ensaladilla oímos un chapoteo en la salita. Seguimos como si nada pero el ruido de agua cayendo al suelo, continuó y la Cotilla, que no es sorda, estaba en tensión - Tu marido está muy agresivo hoy... (le dijo a la abuela) - "Lo mejor será no hacerle caso. Ves a ver qué quiere el pesado de tu abuelito" (me dijo)

Pscualita saltaba fuera del agua, llegando incluso a colgarse de la lámpara del techo y se dejaba caer a plomo. Y así, una y otra vez. El suelo estaba inundado y tuve que rellenar la pila bautismal con más agua de mar para que la sirena no se abriera el cráneo, o lo que sea que tiene en lo alto de la cabeza.

Por si fuera poco, irradiaba en colores. Era como un pequeño tiovivo lleno de bombillas verdes, amarillas, rojas, azules... y me hizo dudar - Abuelito... ¿eres tú? - pregunté, temerosa, pero lo que acabó de sugestionarme fue ver a Pepe, caído bajo una silla y despidiendo los mismos destellos que Pascualita.

Salí de allí como alma que lleva el diablo y cerré la puerta con llave. - Es mejor que lo dejemos solo. El abuelito está alterado. Más tarde, mientras la Cotilla dormía a pierna suelta gracias al chinchón y a la Vuelta ciclista, le conté a la abuela lo que había visto - ¡Esa pulsera es milagrosa! - "¿La pulsera? jajajajaja... He puesto un cable de la luz de muy bajo voltaje dentro de la pila bautismal y a Pascualita, unas diminutas placas con puntitos de luz de colorines. Y cuando le da una descarga ¡salta y se ilumina!" - ¿Y a Pepe? - "¡Claro! jajajajaja ¡Ellos también bailarán el día de mi boda!" - ¡¡¡Abuela, eres una sádica!!! - "¡Y tú una aburrida, boba de Coria!"

jueves, 5 de septiembre de 2013

Cuando me he ido a trabajar había un auténtico mercadillo de cachivaches, plumas, sedas y abalorios, sobre la cama de la abuela. Como no lo arregle, no sé donde dormirá esta noche. Menos mal que me está saliendo la concha de una tortuga, de las grandes, en la espalda y todo me resbala. No me pongo nerviosa... También ayuda tener siempre una olla llena de tila y una botella de chinchón al lado.

Al volver, el mismo mercadillo estaba en el mismo sitio pero estaba montándose otro sobre MI cama. - Abuela ¿a qué viene esto? - "Muy fácil. Aquí dejo lo que me gusta porque, si lo mezclo todo otra vez, no acabo nunca" - Tengo que dormir aquí esta noche... - "¡Que egoísta eres, solo sabes pensar en ti!"

Me he acercado a la pila bautismal y Pascualita ha salido como un misil, sacando los dientes de tiburón a pasear - ¡Eh, eh! Que yo no te he echo nada... ¡Abuela! ¿qué le pasa al monstruo? - "La pobre sabe que va a haber una boda y tiene los nervios a flor de piel" - ¿Qué va a saber, si es un pez? - "Pero es muy lista" - Seguro que has sido tú quién la ha puesto así. Lástima que Pepe no hable. - "¿Querrías que fuera un chivato? ¡Pues solo le faltaría eso al jibarizado!... Lo que ha pasado es que le he estado probando cosas a Pascualita porque quiero que, en mi boda, vaya echa un pincel. ¡Y no le gusta que la trasteen!"

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaaaa!... Mirad, lo que he encontrado ¡una pulsera que lo cura todo y encima, da buena suerte! - ¡Dónde estaba? - En un contenedor que... - Poca suerte habrá dado si la han tirado a la basura jajajajajaja - ¡Envidia cochina es lo que tú tienes! Mira que bonita es. - "Brillar... brilla. ¿Por qué no me la dejas llevar a mí" - Porque tu ya tienes suerte...¿Te imaginas que me sale novio en tu boda? - No caerá esa breva. - ¡Que cruz tienes con ésta nieta!

miércoles, 4 de septiembre de 2013

- ¿Te has decidido ya, abuela? Es que no hay por donde pasar ni donde sentarse, con tanta ropa al retortero. ¡Que las invitaciones ya están mandadas! - "No me atosigues. Todo se andará. Ahora tengo una cosa más importante que resolver" - ¿Más que el vestido de novia?

- "Que difícil es esto de casarse. No recuerdo haber discutido tanto con el novio cuando me casé la primera vez... claro que entonces no teníamos dónde caernos muertos y no podíamos escoger" - ¿Qué pasa ahora? - "Yo quiero ir a la Catedral de manera original. En un tandem; un motocarro; una vespa con sidecar; en un carro lleno de paja y tirado por dos mulas... Algo así. Pero Andresito ha dicho que no. Que vamos a ir en rolls roice. ¿Has visto que cosa más vulgar? Más burgués, imposible. ¡¿Qué pinto yo en un rollrois, o como se llame?!" - Andresito no está para ir en bici y lo del motocarro y la vespa está ya muy visto. - "¿Ah, sí?" - En cuanto a lo del carro, no sé si será contraproducente para la noche de bodas. El traqueteo puede fastidiarle los riñones y la luna de miel la pasará en la Uci... bueno, la pasaréis porque el cura dirá: para lo bueno y para lo malo jejejejeje... - "A mí que no me espere. Montaremos fiesta en El Funeral con novio, o sin novio" - "¡¡¡Abuela!!!"

La funda del termo de los chinos está terminada. Tiene una variedad de colores que dañan la vista. - ¿No había hilos más discretos? - "Como aún no sé que llevaré, he echo un cocktel de colorines... alguno coincidirá con mi traje" - ¿Y éste triángulo azul? -  "Está dedicado a Andresito porque en el viaje de bodas va a tomar viagra por un tubo. Ya le he dicho que no se escapa de hacer el salto del trigre ¡¡¡Me hace taaaaaaaaaanta ilusión!!!" - Te irás casada pero... volverás viuda, a éste paso.

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaaa! ¿Qué le pasa a tu nieta? - "Lo de siempre. Solo es buena para aguar las fiestas" - ¡Qué cruz tienes con ella! Mira, he conseguido unos patines con las ruedas en línea. No son del mismo color porque no estaban en el mismo contenedor pero... ¿A qué son bonitos? Además, si llevas vestido largo, no se verán. ¡Ay, ya os imagino entrando en la Catedral! - ¿Este es el "vehículo" que quiere que lleven? ¡Está loca! Andresito no se lo pondrá. - Es clavadito a ti: un aguafiestas... ¿Te imaginas a tu abuela, deslizándose como esas payesas ibicencas? ¡Será fantástico! - "¡Me encantaaaaaa!" - ¿Y qué hacemos con la alfombra roja que irá desde el altar hasta la calle? - ¡Jopé, todo son pegas!

 

martes, 3 de septiembre de 2013

- "¡Vaya, por fin una buena noticia! Vamos a brindar por ello. Trae el chinchón que la ocasión lo merece" - ¿Ya te has decidido por el vestido de boda? ¿o tal vez Andresito te he perdonado el que le dijeras que su madre se estaba muriendo? - "¿Perdonarme? ¡Yo tengo que perdonarle a él por querer fugarse! pero, de momento... no estoy por la labor" - ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaa! ¿He oído que vamos a brindar? - Luego dirá que está sorda.

- "El ministro que se ha caído de un Guindo, ha dicho que ha bajado el paro. ¿Es o no es una buena noticia? Ahora mismo voy a llamar a Blas el parado, a ver si ha tenido suerte" - Mientras te contesta, no perdamos el tiempo. Venga ¡por el ministro! - La Cotilla es la más rápida al sureste de la Tramontana y en un abrir y cerrar de ojos, se ha echado el licor a la boca, sin anestesia ni parpadeo.

Vi a Pascualita asomándose al borde de la pila bautismal. Por lo visto, las sirenas son los sabuesos del mar porque ésta tiene un olfato privilegiado. Aunque duerma, nota el olor del chinchón. - "Nuestro amigo no ha tenido suerte... que pena. A ver si ahora, en septiembre, se activan las visitas de corruptos famosos a los juzgados y vende otra vez croquetas. Al pobre todo le sale mal. Pensaba que, estando el Mallorca en 2ª división, se pasaría el tiempo ganando partidos; eso haría que cada vez fuera más gente a verlo y él, colocado en una de las puertas del estadio, vendería croquetas como si fuesen rosquillas pero... su gozo en un pozo. Está deprimido y piensa, con razón, que le ha mirado un tuerto" - Le habrás dado ánimos, por lo menos. - "Claro. Le he dicho que el mal de ojo llega para quedarse mucho tiempo, así que lo mejor que puede hacer es afiliarse a un partido político y medrar en él. Siempre puede caerle un SOBREsueldo..." Se habrá quedado tranquilo el hombre con tus "ánimos"

- ¿Y se sabe por qué no ha conseguido trabajo con lo apañado que es? - "Porque era el número 32 y el paro ha bajado en 31 personas (¡TREINTA Y UNA!) ha dicho el ministro que se cayó del Guindo y quedó... como quedó. A la vista está" - ¿Hemos brindado por "esa" subida? - "Por lo menos, 31 parados ya no lo son" - Menos da una piedra, desde luego... ¿El ministro tenía cara de guasa cuando lo ha dicho? - "Lo he oído en la radio" - ¿Se escuchaban risas de fondo? ¡Niña! pon otra copita... para digerir lo indigerible.

lunes, 2 de septiembre de 2013

Al llegar a casa estaba todo revuelto y olía a incienso, pachuli y porro. Una mezcla infernal que me ha obligado a abrir, de par en par, las ventanas y el balcón. En la cocina, Pascualita reptaba por la mesa lanzando dentelladas al aire, bizca perdida y con los pelos-algas de punta. Ante tan horrible espectáculo he optado por irme, llevándome al pobre Pepe y salvándolo de la fiera corrupia .

- ¡Abuelaaaaaa! ¿Qué pasa aquí? - "¡Estamos en mi cuarto!" - ¿Quienes estáis?...- pregunté, al mismo tiempo que entraba - Hola... bisabuelita... - No esperaba encontrarme a la Momia, que estaba casi enterrada bajo montones de trajes a cual más colorista. La mujer estaba feliz, pasándose un canuto entre la abuela y un artista travesti, amigo suyo. - ¡Fíjate de ropa más bonita que ha traído ésta chica. Tu abuela tiene unas amigas estupendas... si las mías, las pocas que me quedan, fueran así no tendría que haber encargado mi vestido a Dior ¡Mecáchis!

-"Ayúdame a encontrar el conjunto adecuado para casarme... Es todo tan precioso y original, que no puedo decidirme." - ¿Te pondrás lo que yo elija? - "No, eso será lo que descarte" - ¿Por que no vas tú también a Dior? - "¿Y perder mi personalidad, mi identidad?" - La Momia se puso a aplaudir y un escalofrío recorrió mi espalda cuando dijo: - ¡Que cruz tienes con tu nieta!

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaa! Hola, Momia. Abajo está tu hijo esperándote. - Ya lo sé. Me ha traído él. - ¿Cuánto tiempo llevas aquí, bisabuelita? - Unas tres horas... ¿no? (se dirigió a la abuela) Jajajajaja ¡Yo esperé nueve meses, así que todavía tengo saldo jajajajaja

Bajé a ver a Andresito. El pobre que ya no sabía como sentarse, hacía tiempo que se había comido las uñas. - ¿Por qué no subes? - Me lo han prohibido. Dicen que da mala suerte que el novio vea el vestido de la novia... - Eso son tonterías. - Ni lo sé ni me importa y por supuesto, no pienso averiguarlo. ¿No te parece que ya estoy teniendo montañas de mala suerte? - ¡Que quejicas sois los hombres! Te advierto que tu madre se queda a comer y luego quiere ver la etapa de la Vuelta a España... Anda, sube, pero no intentes entrar en el cuarto de mi abuela. Allí está "el traje misterioso"... supongo.

No hubo modo de convencerlo. Le bajé comida en un taper, un poco de vino con sifón, dos rodajas de melón, el café y el chinchón y el me miró con ojos agradecidos - Que suerte tener una nieta como tú (me dijo, cariñoso, mientras una lágrima rodaba por sus mejillas)

Tengo que reconocerlo. Valgo un potosí y se sacrificarme cuando algo vale la pena... como la Torre del Paseo Marítimo...  

domingo, 1 de septiembre de 2013

- Abuela ¿es necesario que nos pasemos toooooooodo el día hablando de la boda? - "¿Hay algo más importante?" - Pues, sí. Cuidar de tu novio, que está el pobre quedándose en los huesos. - "Mira si me cuido de él que, anoche mismo, estando en El Funeral, le elegí el sitio en la pared de los finados, donde pondré su foto cuando la palme. No me puede acusar de falta de previsión" - ¿Y le hizo gracia? - "Es un desagradecido... Si no fuera por lo que es, no me casaba con él" - ¿Y por qué es? - "Por la Torre del Paseo Marítimo, entre otras cosas" - O sea, que te casas por interés. - "¿Yooooooooooo? ¡En mi vida he sido una persona interesada!"

- Das por supuesto que te quedarás viuda... Quizá se quede viudo él. - "No le daré ese disgusto a mi Andresito... ni el me lo dará a mí porque sabe que me haría mucha ilusión ver su foto en la pared de los finados" - ¿Se lo has dicho? - "¡Claaaaaaro! Entre enamorados no debe haber secretos"

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaa! ¿Andresito se va de viaje? Me lo he encontrado en el aeropuerto, cargado de maletas. - La abuela se levantó de un salto, cogió el teléfono y llamó a su novio. - "¡¡¡Andresito (y se puso a llorar, desconsoladamente) tu madre se está muriendo y no deja de llamarte!!! ¡Deja lo que estés haciendo y corre a la cabecera de su cama para darle el último beso! ¡¡¡Correeeeeeeee!!!" - Cuando colgó, sirvió tres copas de chinchón, mojó un dedo en la suya y lo acercó a la pila bautismal - ¿Por qué haces eso? (preguntó la Cotilla) - "Me da buena suerte... (cuando vio a la vecina intentando hacer lo mismo, gritó) ¡Solo funciona conmigo!"

- ¿Qué es lo que acabas de hacer, abuela? - "Evitar que mi novio huya" - No querrá saber nada más de tí después del disgusto que le acabas de dar. - "Sabe que soy una mujer de recursos y eso le fascina" - Pero decirle que su madre se muere...- "En la guerra y en el amor, todo vale" - Entonces llamó a la Momia y le contó lo que había echo - ¿Que dice? - "¡Que ahora mismo se mete en la cama y se pone a jadear como si tuviese un orgasmo! Que pena no haberla conocido antes jajajajajaja"