domingo, 9 de septiembre de 2012

La abuela ha venido cansadísima y con unas ojeras que le llegaban a los pies. Parecía sonámbula y de echo se ha ido directamente a la cama. Menuda noche toledana habrá pasado.

Era mediodía cuando se ha levantado y ha ido a saludar a Pascualita - "Perdona, hija, pero estaba para el arrastre cuando he llegado" - La sirena se ha subido de un salto al borde del "acuario" dispuesta a escuchar todo cuanto quiera contarle su amiga. No me he podido contener y he comentado que ya no tiene cuerpo para tanto jaleo amatorio - "Aguanto lo que me echen y más pero no ha sido este el caso. Nos hemos pasado la noche en el hospital" - ¿Por qué? - "Andresito ha sufrido un cólico nefrítico y parecía una parturienta primeriza gritando por los rincones" - Huy. Dicen que duele mucho... ¿Ha pasado algo más? - "Pues que hemos tenido muy mala pata... la pastillita azul ya había echo su efecto y teníamos por delante horas de amor apasionado ... pero se puso a gritar como un descosido. Fíjate como sería que unos chicos que estaban haciendo el botellón en la acera de la Torre, llamaron a la puerta pensando que estaban matando a alguien. Ellos fueron los que telefonearon a la ambulancia. Para mí que eran ultras porque no paraban de reír diciendo ¡Arriba España!" - Sería por la reacción de la Viagra. - "¡Te he dicho mil veces que mi Andresito no toma esas cosas!" - Escucha, abuela, pastilla azul y Arriba España = Viagra. - "¡Te digo que es un reconstituyente!"

A la Cotilla no se le ha escapado la mala cara de la abuela. - ¿Resaca de chinchón? - "No. Noche de hospital" - ¿Ya estás en los últimos estertores? - "Muy graciosa" - Antes de morirte llena bien el congelador y la nevera de tapers con comida para que, durante un tiempo, podamos seguir comiendo bien. - "Eres un estómago con patas... Andresito se ha puesto malo" - ¡Te lo has cargado! jajajaja... ¿cuántas viagras se ha tomado? - " Solo una pastillita azul" -  La Cotilla y yo hemos dicho, a coro - ¡La Viagra!

Después de comer nos hemos relajado con unas copitas de chinchón. - "Hay algo que no me explico. ¿Cómo pueden saber tanto de trajines amorosos dos almas en pena como vosotras, que lleváis mucho tiempo en dique seco y en cambio yo, sin enterarme?" - Ya sabes que el cornudo es el último que se entera, con perdón. - ¡¡¡Cotillaaaaaaa!!!


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