No se como saldrá hoy la comida porque la abuela está de un humor de perros desde que esta mañana ha leído el Diario. Esperaré a que me lo cuente, que no quiero acabar comiendo un bocadillo.

Tiene a Pepe y a Pascualita firmes en la cocina. Continuamente se oyen golpes de los cacharros que usa y no se si entrar a poner un poco de paz. De momento me asomaré - ..." ¡Y que no me venga nadie con el trasnochado racismo porque lo mandaré a freír monas!... Pascualita, en tu hábitat no lo permitas. ¡Ni un paso atrás ante la discriminación! Si una herida supura, se la limpia a fondo y si hay que recortar tejido dañado, se corta y a otra cosa, mariposa ¡Pues aquí, igual!... ¡Fanáticos religiosos tenemos para dar y tomar por eso no necesitamos que vengan de fuera a seguir pisándonos!

- Abuela, cálmate o te dará algo ... He ojeado el Diario y he visto la noticia. Pero ya está resuelto el asunto... - "¿De qué hablas?" - Del tiro que recibió un negro que quiso acuchillar a un policía - "Por lo visto es un pobre desquiciado y lo del tiro fue un mal menor. Por suerte no apuñaló al policía" - ¿Entonces? - "Tiene narices que una mujer no pueda hacer su trabajo por la intransigencia de unos machistas fanáticos que no han entendido que viven en un País donde todos somos iguales (o al menos eso nos han dicho)"

La Cotilla entró como una exhalación - ¡He tenido que bajarme de la acera y por poco me atropella un coche! ¡Les he llamado de todo! - "Has pasado por la mezquita ¿a qué sí?" - ¿Cómo lo sabes? - "Porque me he enterado de que a las guardias de la Ora que trabajaban en esas calles, las han tenido que cambiar de lugar porque eran insultadas y vejadas por esos "caballeros" que han venido a España y se han creído que todo el monte es orégano" - Eso les he dicho yo. ¿Acaso no pasáis por las aceras de las iglesias? Bueno, pues no he podido pasar por la de la mezquita. - "Tendríamos que ir la mujeres, en manifestación, a tomar esas calles. ¿Acaso las han comprado? Aquí todo el mundo paga sus impuestos, por lo tanto, son de todos... A ver si Mateo se entera" - ¿Mateo? - "¡El Alcalde! Contra la intransigencia machista ¡ni un paso atrás! Empiezas a ceder y acabas con velo y sayas. Y esas mujeres que trabajaban allí, deben poder seguir haciéndolo y al que no le guste... ¡ancha es Castilla!"

Mientras notaba a Pascualita removiéndose en mi escote (fue el único sitio en el que se me ocurrió esconderla cuando entró la Cotilla) intenté cambiar de tema para calmar el ambiente - ¿Qué comeremos hoy, abuela? - "Cuscús" - ¿Pero... pero si estás despotricando toda la mañana contra los moros? - "¡Contra "esos" moros fanáticos!  No te equivoques. Hay gente buena, honrada y trabajadora que ha salido de su tierra para dar a sus hijos una vida mejor y lo único que quieren es vivir en paz, como la gran mayoría de nosotros... Anda, pon la mesa" - ¿Han venido los de Rajoy? ... Pues ponme un buen plato - ¡Eso. A ver si revienta! - La abuela y la Cotilla se miraron y acabaron poniendo, ambas, los ojos en blanco.